Verano y Sal, cantiñas para mis alegrías, versos con aires de mar y levante que te salpican de sol y arena. No podemos despedir esta temporada de imprescindibles sin adentrarnos nuevamente en el soniquete que el onubense Arcángel nos entrega de alegría y cantiña, de Cádiz a Córdoba. Llevamos buscando por los callejones, el nuevo, el de siempre, el viejo, el intemporal pellizco flamenco, y esperamos que con el calor del estío reencontremos ese rincón que nos llene de duende por un breve instante. Arcángel y Miguel Ángel Cortés con gusto evidente, nos invitan a que sigamos el hilo de estos cantes, pilares imprescindibles para cualquier aficionado, grandes para el baile, y mal encasillados chicos para el cante, pues como siempre hemos escuchado, el grande o el chico no es el cante, lo es el cantaor.
Biblioteca.- Mil y una historias de Pericón de Cádiz. J. L. Ortiz Nuevo. Barataria. 2008.
Cajón de Sastre.- “Cuando Caballero Bonald le preguntó a Tía Anica La Piriñaca qué sentía cuando cantaba, ésta le respondió: ‘Cuando canto a gusto, me sabe la boca a sangre’. No es posible resumir el flamenco con esa energía y despojamiento. Cuando murió el marido, que no le dejaba cantar, con ocho hijos, se puso a cantar. Acudía incluso a prostíbulos en busca de clientes que le pagaran por cantar. Cuando contaba estas penas, decía: ‘Yo he tenido muy buena estrella”. -Anécdotas de Félix Grande, extracto de la publicación digital: Pellizco Flamenco-
Sentidos:
Mira.- Miguel Liñán, baila; Marina Heredia, canta.
Canta.- Cuatro tinaores / por una cañá / dicen que tinaban / no tinaban ná.
Salud.
Obra: Cantiñas
Cante: Arcángel / Francisco José Arcángel Ramos (Huelva, 1977)
Toque: Miguel Ángel Cortés (Granada, 1972)
